Más
allá de lo que ven los ojos, más allá de lo aparente,
en la
profundidad de las sombras… hay un no sé qué
y un
qué sé yo, que convine saber lo que es…
(Imp…)
Con esto del coronavirus
nos ha
tocado la china,
pero
solo en apariencia,
pues
existe una cocina
donde
trabaja la ciencia
en
base a su doctrina,
imponiendo
su creencia
dándonos
gato por quina
hasta “encontrar”
antivirus.
Declarado
el estado de alarma
se
pone en marcha la rueda;
nos
confinan en casa
con
amplio toque de queda.
No
sabemos lo que pasa
y así
la vida se enreda;
la
libertad de la masa
con
restricción se empareda;
y escribiendo
en tabla rasa
se
programa nuestro Karma.
A
veces los trampantojos,
explicados con urgencia,
confunden
a nuestros ojos
y se
nos escapa su esencia.
Lo que
antes era vida
se
restringe en esta veda;
la
gente está apercibida
y
obligada a cumplir queda.
Impersonem.
P.D.: Pienso que el confinamiento en casa
es la medida más efectiva frente al
peligro que nos acecha.
Impersonem.
P.D.: Pienso que el confinamiento en casa
es la medida más efectiva frente al
peligro que nos acecha.
Me alegra volver a leerte aunque sea en estos tiempo de estado de alarma y de Coronavirus.
ResponderEliminarMe ha gustado tu poema, amigo mío, tienes mucha razón, en lo que dicen tus versos, nos confinan en casa, y lo que antes no era grave, como admitir las manifestaciones del 8M, ahora lo es, y no nos dejan salir.
Muchos besos y cuídate mucho.
Y yo me alegro de verte por aquí.
EliminarNos confinan y durará ese confinamiento un buen período de tiempo, habrá que aguantar el tirón.
Yo creo que el problema no estuvo tanto en las manifestaciones del 8M como en el hecho de que mucho antes el bicho ya estaba latente en muchos contagiados asintomáticos, pero bueno, es opinable...
Intento cuidarme, pero el peligro existe a la vuelta de cualquier esquina y en muchos lugares comunes que, por necesidad vital, tenemos que visitar y me puede alcanzar, espero que no.
Me alegro de verte bien. Un abrazo.
Hay que sobrevivir y adaptarse a circunstancias. Nuestras miradas, reflexiones y conclusiones si son posibles debemos hacerlas mirando planos más amplios que los del país -el panorama internacional- y con un aliento constructivo. Y que no nos toque el bicho.
ResponderEliminarHabra que intentarlo Fackel, el instinto de supervivencia es el más fuerte en nosotros y esta vez nos ayudará a adaptarnos a lo que nos ha venido encima.
EliminarVeo el panorama internacional y es poco esperanzador. Además yo tengo mis propias ideas al respecto, son más intuitivas que científicas, y por ello tal vez más libres de ataduras contractuales.
Intento ser constructivo, pero siempre tiendo a hacerlo a través de lo que entiendo como realismo más que a lo que se entiende como optimismo...
Y cierto, que no nos toque el bicho y ojalá que pare ya y no le toque a nadie...
Abrazo
A pasarlo
ResponderEliminarun abrazo
A evitarlo como podamos; y a esperar que pase pronto esta coyuntura tan extraña...
EliminarAbrazo
Obligados estamos, mientras estemos vivos y no salgamos de casa con los pies por delante...
ResponderEliminarBesos.
Intentaremos, Amapola, salir con los pies sobre el suelo, andando con pie confiado, cuando esto pase, que no va a ser pronto, por cierto, y no va a se fácil, porque en todo ello subyacen sombombras que habrá que disipar con la luz de razón...
EliminarAbrazo
Me preocupan tantas cosas relacionadas con lo que está sucediendo, además de la enfermedad, que estoy dando vueltas y vueltas a las lecciones que de todo esto sacan los poderosos y es posible que no saquemos los que no lo somos.
ResponderEliminarNo quiero parecer conspiranoica.
Un abrazo.
Yo también le doy vueltas Laura, y estoy en la misma línea que tú; creo que algunxs sí sacamos conclusiones acerca de las conclusiones que pueden estar sacando los poderosos; a cerca del origen del problema; y acerca de los fines del problema...
EliminarNo me pareces conspiranóica, estamos en la misma línea de pensamiento, tus dudas y las mías y las de mucha gente están en la senda de la razón en busca de la verdad...
Yo, desde el principio, veo un no sé qué y un qué se yo en todo esto que necesitamos saber lo que es... En esto no solo se refleja un problema de sanidad social, por una pandemia, sino una guerra geopolítica, comercial y de modelo político-económico-social... lo de antes, pero a lo bestia... aunque tal vez estoy equivocado... ojalá lo esté y todo salga bien y haya una catarsis social que se acerque a la utopía y nos saque de esta distopía en la que vivimos...
Abrazo
No nos queda otra... también te digo que he sufrido en carne propia el desmoronamiento del sistema sanitario, y cuando falla la sensación de abandono es terrible.
ResponderEliminarSaludos.
Tienes razón Toro, cuando la estructura sanitaria se demorona, esa sensación de abandono, de falta de asistencia, es terrible... te ves inerme y desprotegido.
EliminarTenemos que adaptarnos a esta coyuntura y atavesarla con inteligencia, colaboración social y el menor daño posible, pero no va a ser fácil y el riesgo está en muchos espacios que, por necesidad vital, tenemos que visitar y en los que tenemos que coincidir con otra gente... Este bicho aprovecha cualquier descuido para colonizarnos y destrozarnos...
Ojalá que todo pase pronto, aunque el día a día evidencia que va a durar mucho mucho mucho, meses...
Salud y resistencia.
Abrazo
En efecto, nos llama la realidad: se desvela el trampantojo.
ResponderEliminarBueno, Pedro, si ese trampantojo se desvela; si conseguimos fijar nuestra retina y nuestra razón en las cosas que nos atañen y ver en qué estado están las "cosas (derechos)" que dejamos en manos de la política, abdicando de nuestra obligación de control, habremos sacado, por lo menos, algo positivo de esta tragedia, pero me temo que la gente está más al folclore y a su minuto de gloria televisado que a reflexionar amplia y hondamente sobre las estructuras sociales en las que nos integramos y de las que dependemos... ya sabes que la realidad responde en función de como la interroguemos, por ello cada cual obtendrá de la "realidad" de esta coyuntura las respuestas en función de lo que se pregunte sobre ella... y llegará a sus propias conclusiones... el cambio a mejor o a peor dependerá de la prevalencia por número o peso de las conclusiones mayoritarias o privilegiadas...
EliminarEn fin, habrá que aguantar el tirón y ya veremos a ver cómo sorteamos el campo económico minado que nos espera a la salida de este tunel, como tú muy bien apuntabas en un post que te leí no hace mucho...
Salud y resistencia.
Abrazo
Lo que la vida nos regala es lo que tenemos que aceptar
ResponderEliminarmil abrazos
Tienes razón... pero esta pandemia tiene poco de regalo y mucho de asalto; un asalto de un bicho a nuesta salud; y una desinformación al respecto que nos deja un tanto inermes ante dicho asalto por falta de medios, de medidas y de verdades con las que poder razonar adecuadamente...
EliminarPero mientras podamos resistir, resistiremos, y ante la duda, mejor guardaditos en casa y procurando hacer las cosas lo mejor posible...
Abrazo
Gracias por darme a conocer la palabra "trampantojo". La ignoraba. Fonéticamente suena fatal, pero su semántica es muy rica.
ResponderEliminarUn abrazo
A mí no, Luis Antonio, dáselas a Pedro Ojeda (blog La Acequia); yo conocía la palabra, pero fue a partir de que se la vi a él en uno de sus post cuando empecé a utilizarla asiduamente. Así que, ambos le debemos las gracias a él.
EliminarA mí me suena muy bien, y ciertamente su semántica es muy rica...
Salud y resistencia.
Abrazo
me haces sonreir con tus escritos alados
ResponderEliminarMe alegro, Recomenzar, que mis escritos te hagan sonreir; y si esa sonrisa obedece a alegría, mejor que mejor... ¿Sabes? tu sonrisa es una valoración de mis escritos que me alegra inmenso...
EliminarSalud.
Abrazo
Desde luego que la vida se está enredando... Y mucho. Tendremos que deshacer los nudos uno a uno... Me ha gustado este poema; tienes una lectora nueva. Besos.
ResponderEliminarHola Gema, gracias por pasar por aquí, por comentar y por quedarte como lectora...
EliminarYo creo que sí, que se está enredando mucho y que después va a ser difícil esa tarea que dices de dehacer los nudos... y sí, tendrá que ser uno a uno, porque cada uno de ellos va a precisar mucho afán...
El futuro se presenta incierto y nos tenemos que preparar, aunque no sé muy bien cómo, para una travesía dura de un "desierto económico" de dimensiones imprevisibles, ergo incalculabres...
No sé, yo estoy en la idea de que más allá de lo aparente está lo real; lo que subyace en esta coyuntura en la que estamos; lo medular y lo nueclear del problema...
Salud y resistencia y, ya sabes, aquí la puerta siempre está abierta, entra cuando quieras, estás en tu casa.
Abrazo