Cuatro Jinetes del Apocalipsis, por Viktor Vasnetsov (1887)
imagen se Wikipedia
- Tú y yo.
- ¿Cómo?
- Así.
- ¿Adónde?
- Allí.
- ¿Por qué?
- Por ti.
- Calla.
- No.
- Dime.
- El río suena,
oye, escucha,
y saca conclusiones.
La cúspide de la torre se quiebra
y caerá toda su grandeza.
Pero todavía es pronto para gritar victoria.
El asno sigue coceando
y la razón se ofusca
persiguiendo zanahorias.
El miedo nos persigue
a hambre y a espada.
Y la guerra abierta
(también la secreta)
mata los cuerpos
y la sangre derrama.
Las noches son oscuras
y empedradas.
A la vuelta de cada esquina
esperan mil fantasmas
con cadenas que atan.
Las dudas existenciales
vislumbran terribles certezas.
Empiezan a asomar
las plagas del destino.
Grita y llora hasta que surja la luz.
Hoy, día de tinieblas, no amanecerá.
El usurpador podrá robar tranquilamente
y el dictador podrá cagar sin prisas
(disciérnase quiénes son los dictadores).
La hora de la verdad llega,
pero los ilustres y los sabios
no la han detectado
o no quieren hablar de ella
por esas extrañas razones
que se ocultan tras la ciencia.
¿Muerte?
- Calla.
Impersonem.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar(Perdón, estoy más loca que chiva en carnaval, la primera parte del comentario que te mandé la había escrito para Sarco en su nueva entrada y la copié junto a la tuya. Pienso que no entenderás lo del mimo)
ResponderEliminar______________________________________
Ah no Impersonem, empezamos muy bien, pero el final me descolocó.
La palabra “Calla” le da un cierre hermoso, pero yo pensaba que seguiríamos con Cupido.
Este tipo de conversaciones siempre aplacan los monstruos cuando todo está negro, y hablar de la muerte aplaca la muerte (o el instinto) valga la redundancia. Vamos a morir cuando tengamos morir, si alguien se adelanta por sus propios medios entonces será un maleducado.
Perdón esta tonta acotación final, pero leo que estás triste y no sé qué decirte para sacarte de ese estado.
Un beso
Las galleticas oreos son ricas cuando uno está alegre, de lo contrario parecen insípidas.
Lo siento Vivian, soy reincidente en la pesadez...
EliminarTambién hace tiempo que escribí esto sobre mi visión del mundo... miro el mundo y estoy desolado... pienso y no encuentro respuestas... suelto palabras por si alguien quiere cogerlas (en Español no en Argentino) al vuelo... camino y reviento... y no sé qué más... anodino y apático me pronuncio... y mañana ya veremos...
Hablo de la muerte que se adelanta por medios ajenos... sólo hay que ver los telediarios... hablo de un mundo que en vez convivir en paz... sobrevive en medio de luchas y guerras... y hoy por hoy todo se está poniendo muy raro... y hablo de acciones ocultas que hacen daño y pienso por qué se hacen... y por qué les toca a algunos inocentes... ¿cómo recuperan los inocentes la vida que les deshacen?
Tus acotaciones son siempre muy ingeniosas, esta también y me ha hecho reír... ¿Salir de este estado? no hay puerta, no hay ventanas...
Lo de las galleticas oreo es un enigma que tendrá que descifrar el paladar...
Besos.
Nadie nos libramos de la tristeza... Y es bueno sacarlas fuera, desahogarse. Lo peor es guardar...
ResponderEliminarUn beso.
Sakkarah
Miro, veo, me entristezco... y a veces lloro.
EliminarBesos.
¿Por qué será que siempre evitamos hablar de la muerte cuando es nuestra compañera y que dentro de poco un día nos visitará?
ResponderEliminarNo nos enseñaron a no temerla, siempre la evitamos, la ignoramos, ya desde niños cuando algún familiar se moría, por ejemplo, los abuelos, en un principio nos lo ocultaban, cuando lo que se debe hacer desde la niñez es enseñarnos a verla con naturalidad, como así es la vida, es un comienzo y también un final.
Me encantó esta manera que tuviste de versar poesía en forma de diálogo.
Un beso.
La muerte es inexorable y está ahí... lo peor es cuando manos y mentes ajenas la imponen de una u otra manera... y hay mucho cainita por ahí... lobos con piel de cordero...
EliminarEl diálogo nace de lo familiar...
Besos.
Empiezan a asomar las plagas del destino.
ResponderEliminarme he quedado con el alma tiritando.
un abrazo, Imper!
Se las ve a la legua... no sé mucho de historia pero creo que la vida nunca ha estado sometida a unas perspectivas de empeoramiento tan evidentes...
EliminarBesos.
Por sobre todas la tendencias y realidades tangibles, existe la fe. Ese pilar de la vida que me sostiene aún optimista. Si, hay crisis, hay dolor, hay horror.... desolación y rabia, pero también esperanza en un mundo mejor... así antes de ello debamos pagar un precio muy alto por las acciones de los humanos sin alma. Gran entrada para pensar amigo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Todo empeora cada día... aferrados a la fe, a la esperanza y a la desesperación a medida que la vida transcurre... se constata una cruda realidad que da miedo...
Eliminar... sí un precio muy alto...
Besos.
Cada vez me asusta menos.
ResponderEliminarHay días que pienso en ella como un gran descanso.
Saludos.
No sé qué pasará con la muerte y tras la muerte... pero creo que la vida no debería ser atacada como está siendo atacada desde algunos sitios...
EliminarBesos.
Un abrazo Impersonem!
ResponderEliminarEspero todo esté bien.
Vivian